Creo en la vida eterna en este mundo, hay momentos en que el tiempo se detiene de repente para dar lugar a la eternidad Fiodor DostoyevskyFiódor Mijailovich Dostoievski nació el 11 de noviembre de 1821 en la ciudad de Moscú, en el seno de una familia acomodada y desestructurada. Su padre, encargado de su educación, era un hombre déspota, violento y adicto al alcohol. Todo lo contrario a su progenitora, un refugio de amor y protección para Fiódor y sus seis hermanos. La temprana muerte de su madre, a causa de una tuberculosis, provocó el traslado del joven a San Petersburgo, donde inició sus estudios en la Escuela de Ingenieros. Allí, Dostoievski comenzó a anidar una pasión irrefrenable por la literatura, iniciando además su andadura como escritor. Sin embargo, el fallecimiento de su padre años más tarde casi le cuesta la razón, motivando un cambio radical en su forma de enfrentarse al mundo. Un sentimiento incrementado por la epilepsia que padeció durante toda su carrera y que supo incorporar a su obra a través de los personajes. Obras de Dostoievski
Dostoievski siempre consideró ‘Los hermanos Karamov’ su obra maestra. El éxito como escritor llegó en 1849 con la novela epistolar ‘Pobres gentes’, avalada por el público y la crítica. Lamentablemente, la notoriedad no tardó en desaparecer. En parte, por su condena a muerte tras colaborar con grupos liberales y revolucionarios. Una ejecución que fue rebocada minutos antes de la hora establecida y que quedó en cuatro años de presidio en Siberia. Al salir, la suerte volvió de su lado. La obra ‘Recuerdos de la casa de los muertos‘, le devolvió la fama que ya saboreó en el pasado. Y que mantuvo con sus creaciones posteriores, ‘Memorias del subsuelo’ y ‘El jugador‘. No obstante, aquella época de celebridad dio como resultado una de las novelas más influyentes e internacionales de la literatura rusa: ‘Crimen y castigo‘. Esta terminó por consagrar su carrera literaria y estableció un estilo propio, con la exploración de la psicología humana como principal seña de identidad. Durante esta época de gran esplendor, Dostoievski sufrió también los envites del tiempo, afrontando la muerte de su primera esposa, su hermano y su primera hija en común con Ana Grigorievna, la mujer con la que compartió el resto de sus días. Un profundo dolor que se vio restaurado con el nacimiento de su segundo hijo. ‘El idiota’, ‘Los demonios’, ‘Diario de un escritor‘, ‘El adolescente‘ y finalmente ‘Los hermanos Karamov‘ dieron cierre a una trayectoria con luces y sombras. Dostoievski murió en 1881 a causa de una hemorragia pulmonar. |
Categorías
Todo
Archivos
Junio 2020
|